"Gracias a Dios le doy, por haberme dado el don sublime y el regalo maravilloso de poder dar consuelo, de hacer brillar la alegría y esperanza, en los ojos antes nublados por la tristeza y opacados por el dolor. Haz suave mi mano y ligera cuando toque el dolor, dame acierto en el orden técnico para que sea oportuno, haz que llene los corazones de esperanza y les despierte las ilusiones. Haz que mi corazón sea muy compasivo para que en el quepan todos los dolores, tristezas e incomprensiones de mis asistidos. Hazme sereno para que ninguna contrariedad me turbe y ninguna ofensa me impaciente, hazme alegre para poder alegrar desde mi propio dolor. Hazme prudente para no lastimar ni desangrar, haz que aprenda a comprender sinceramente a no desear otra recompensa en esta vida, que la felicidad de hacer bien y a no llevar junto al que sufre mis propias inquietudes y penas. Que aprenda a olvidarme y a ocultarme en mi mismo, para que no vean en mi sino solo tu caridad y mi corazón pleno de dulzura, comprensión y generosidad. Haz que mi misión sea en lo posible semejante a la tuya."
domingo, 28 de noviembre de 2010
Día del Fisioterapeuta
Sé que quizás tenga mi blog en el olvido total, pero aprovechando mis horas de descanso, les mostraré una oración que leí y me gustó muchísimo...La oración del Fisioterapeuta, en conmemoración de nuestro día, el pasado 25 de noviembre.
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